La colocación de una plataforma salvaescaleras en comunidades de vecinos es una de las soluciones más habituales para suprimir las barreras arquitectónicas; por su precio, su instalación rápida y sin obras y su comodidad de uso.
En este portal en el barrio de Rejas, Madrid, un tramo recto de escalera con 4 peldaños supone un impedimento para las personas con problemas de movilidad o usuarios de sillas de ruedas. A pesar de disponer de espacio para la colocación de una rampa, los propietarios de esta comunidad decidieron optar por una plataforma V64, ya que ocupa el menor espacio en la escalera y puede ser usada por cualquier persona con total seguridad y autonomía.